(Abuelohara)

Hace ya tiempo que Flickr se encontró con un competidor muy importante donde poder mostrar nuestras mejores fotografías. La Comunidad fotográfica 500px 500px es una de las más importantes del mercado. Comenzó a funcionar en el año 2009 solo al tran-tran, pero en los últimos dos años ha comenzado a ganar confianza ente muchos aficionados serios y fotógrafos profesionales.

Las funciones básicamente son las mismas, subir fotografías, crear álbumes, etiquetar, comentar, votar o marcar como favoritas y seguir a otros usuarios, añadiendo un elemento más que es el de la posibilidad de poner en el mercado nuestras fotos por si alguien desea comprar los derechos de impresión o de utilización. 

Para ello cuenta con diferentes opciones de licencia de uso, permitiendo compartir o utilizar imágenes, propias o ajenas en un blog, el web, empresas, anuncios, etc. La visualización es mas atractiva al ofrecer la posibilidad de construir un portfolio con un aspecto llamativo y profesional. Estas cuestiones unidas a que se adapta perfectamente a la visualización en móviles, tablets y ordenadores, hacen de 500px una opción interesante.

Aquí os dejo algunas de mis fotografías. Si pincháis en las propias imágenes las visualizaréis desde este blog y si se accede a través del enlace en la leyenda, veremos la foto en 500px donde están incluidos los datos exif, localización y otros datos de la misma. Hay queda señalado la máquina utilizada, ahora mi nueva Nikon D7100, las lentes, distancias focales, etc.

La joven en 500px

Volar en 500px

          

Pescar al amanecer en 500px

Luces en Gijón en 500px

 

Cowboy de Leganés en 500px

La tenista en 500px

Photos 500px by  Francisco Cecilia (Abuelohara)

Francisco Cecilia: Photos · Favorites

Cuarta entrega de Retratos de vecinos en Leganés. Nuestra ciudad ha sido, es y será. Seguirá cambiando físicamente y socialmente sus barrios, las viviendas e industrias. Y sin duda en su desarrollo y su historia los vecinos formarán parte fundamental como hasta ahora. Aquí os dejo imágenes de sus recuerdos, sus historias, sus familias, trabajos, eventos y celebraciones, en definitiva sus vidas en este álbum de Leganés b/n.

Esta vez las fotografías son de retrato, de personas, de caras, de vecinos y vecinas que quizá conozcáis como en algunos casos en que ya reseño sus datos y que siguen acompañándonos cientos de años después de ser retratadas por alguien al que como a muchos de nosotros gustaba la fotografía.

Espero como siempre vuestros comentarios, ayudas y aportaciones para entre tod@s compartir y construir la historia y futuro de esta ciudad que amamos, Leganés.

LEGANÉS B/N - Retratos de vecinos IV

1.- La foto es del fotógrafo, hijo predilecto de Leganés, Juan Calles. En ella dos hombres, trabajadores, que bien pudieran ser los "hermanos Luaces" por la leyenda en la puerta de la camioneta. La foto es del año 1955.



2.- Esta es la primera imagen recuperada de la Fuentehonda. Son los años 30 y en Leganés, las muchachas bajan a por agua con los cantaros y los militares aprovechan para intentar su conquista.
Aquí tienes la historia de la Fuentehonda desde 1930 hasta nuestros días.




3.- Joven pareja. En la época uno de los principales trabajos se desarrollaba en las huertas de Leganés. Los hortelanos dieron buena fama de nuestra localidad.
La imagen es de Leganés en 1930.








4.- Dos mozas pasean por el centro de Leganés. La fotografía es del año 1952 en la calle Juan Muñoz. Como alguna otra de esta colección, está incluida en el libro de fotografías de Juan Calles.








5.- Esta imagen fue cedida por F. Verdugo al archivo municipal de Leganés y representa una estampa típica del descanso en las "Bodegas Frontello", local muy famoso y concurrido donde paisanos y militares se contaban sus batallas.






6.- Somos muchos los que cuando éramos jóvenes jugábamos en el Campo de Tiro en el barrio de San Nicasio. En la foto podéis ver lo que llamaban "pista americana" donde se ejercitaban los reclutas y donde caída la tarde era asaltado por los chiquillos.
La foto puede ser de los años 1960.







7.- El mejor equipo, el nuestro y el mejor campo también. El fútbol se practicaba en auténticos barrizales, aunque en ocasiones bastante cuidados como en el caso del campo de la plaza de Roma, allá por los años cincuenta.


8.- Esta foto está realizada en el "Bar Carriches" que se encontraba en la Fuentehonda y era otro de los locales hosteleros más famosos y concurridos de Leganés. La imagen es de la familia Luna y se realizó en 1953. Conoces al camarero de la foto?.






9.- En los años setenta en Leganés, con el boom poblacional y la cantidad de chiquillos que recibíamos la Comunión, obligaba a los colegios y autoridades a realizar estas en plena calle.
En la fotografía, Don Luis, maestro del colegio San Antonio y yo con mi impecable traje de Santiago que tanto se llevaba.
La imagen es de Leganés en 1972.



10.- Esta fotografía es cedida por L. Carrillo, corneta de la Escuela municipal de música de Leganés, que tuvo sus inicios cuando D. Emiliano, el cura daba clases de música desde su casa. Los vecinos, con más voluntad que conocimientos, sacaban adelante apuestas musicales más que satisfactorias. En 1907 se fundó la primera Banda municipal.

Ya sabes que tu también puedes ser protagonista de la historia de Leganés. Si tienes fotos que aportar o si reconoces a alguien en estos retratos, o quizá eres tu mismo, hazme llegar tu información y la compartiremos juntos. Escríbeme indicando la fotografía y los datos que conoces sobre ella en este formulario de CONTACTO.

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Comienza un nuevo fin de semana y en este invierno, como en muchos otros, el frío de la calle hace que nos quedemos en casa disfrutando de un ambiente más acogedor. Como en otras ocasiones, os dejo un relato de ccooweb para pasar un rato y leer algo que creo merece la pena.

Un relato que rezuma realidad y nostalgia, la de muchos españoles, muchas mujeres que abandonaron sus pueblos de origen en busca de la supervivencia, dejando atrás el amor e incluso su propia vida. Os dejo el relato "María Soledad" de Regino Ferreiros.

Llevaba más de quince minutos sentada en el banco de la marquesina en la parada del 118. Tenía la rebeca echada sobre los hombros, permanecía con las piernas muy juntas, el bolso apoyado sobre ellas y fuertemente sujeto por la mano izquierda. Mientras tanto, la mano derecha, sobre el escote, buscaba distraidamente tocar con los dedos el relieve de la medalla bajo la tela de la camisa, en sus facciones no se reflejaba más que cierta tristeza estructural, no miraba nada ni a nadie en concreto, manteniendo la mirada errante entre la nada.

Eran más de las siete de un domingo por la tarde y la dichosa camioneta no llegaba nunca. María tenía sesenta y nueve años y era viuda desde hacía tres.

Desde hace años, cuando las manos no estaban ocupadas en otra cosa, tenía la costumbre de jugar con la medalla de la Virgen del Carmen, esa medalla de oro era el regalo más valioso y más querido que Emilio la había hecho nunca. La había tocado tanto que podría reconocerla por el tacto entre los cientos de miles de medallas de la virgen del Carmen que hubiera en el mundo. Cuántos años con ella, colgándole del cuello, sintiéndola sobre su pecho, entonces inconscientemente la sujeta con el dedo pulgar y el corazón mientras con el índice busca el borde y lo pellizca notando un leve chasquido sobre su carne.

La camioneta no viene. Antes, cuando era más joven, llevaba la medalla a la vista y le gustaba cogerla y hacerla correr sobre la cadena mientras sentía el suave sonido que producía, era como una cremallera que al cerrar y abrir le hacía sentir un leve y agradable cosquilleo en la nuca. Ahora con tanto robo prefería llevarla oculta bajo la ropa.

La Virgen del Carmen, de su pueblo, tenía una capilla al lado del altar mayor de la iglesia y era muy milagrera, era la patrona de los marineros. Recordaba como cada festividad el cura en la homilía pedía por los marinos. En aquel pueblo del interior, donde casi nadie había visto el mar, donde lo único que se identificaba con el mar era el olor que traían las nubes cargadas de agua cuando el viento soplaba del oeste, por eso, siempre sospechó que el cura era de algún pueblo con puerto de mar, hijo de marineros y que los días de la Virgen del Carmen, preso de una terrible nostalgia, les hacía pedir por su gente, por eso de vez en cuando subía al campanario y miraba el horizonte llano y curvo, como si el de la misma mar océano se tratase.

Cuántos años hacía que no iba al pueblo?, veinte?, veinticinco?, cuántos años hacia que había muerto su madre?; estuvo en el entierro y después, en alguna fiesta de todos los santos había llevado flores a su tumba, luego nada, no volvió. A Emilio no le gustaba conducir tanto y ella allí no tenía a nadie. Cada vez que había ido se había llevado una decepción, todo estaba cambiado, no reconocía nada ni a nadie, el rastro de su pueblo, el rastro del pueblo que había conocido se había perdido para siempre entre rincones, calles y plazas que ahora a penas le decían nada.

Sin embargo cuantas noches había soñado con él, cuántas veces cuando era una cría, había llorado en su habitación de empleada doméstica, desgarrada por la añoranza. A veces, cuando la agobiante sensación de soledad aferraba su corazón y lo estrujaba entre las manos, anhelaba dormir para soñar, anhelaba volver a recorrer las calles de su pueblo onírico y mágico, sentir el agua fría del río acariciando sus pies, escuchar el rumor de la fuente, sofocarse con las carreras de los juegos infantiles, volver a sentir el suave mareo de la fiesta patronal, bailando en la calle con sus amigas entre los mozos y mozas a la luz del farol y al ritmo de la acordeón de un ciego barbudo y borracho. Recuperar el olor y el sonido de las noches de primavera , esconderse tras el alféizar de la ventana para ver la luz de la luna llena esparciendo sombras inquietantes en el huerto y el gallinero, escuchar el sonido del dormitorio durante las noches, con los leves ronquidos de su padre y los rumores rítmicos de la respiración de sus hermanos rompiendo el silencio, frío y profundo, ella en la oscuridad de aquella habitación familiar, envuelta por la sábana de lino y la manta raída, encontraba el sueño seguro, placentero y reparador que no tenía desde hacía años.

Con un chirrido estridente, el autobús tapió la marquesina llenándolo todo de un olor acre y un sonido rítmico y ronroneante, María, con un sobresalto, se levantó de su asiento y en una carrerita llegó hasta la puerta del autobús, se sujetó fuertemente a la barandilla y con cierto trabajo subió los peldaños metálicos.

- Buenas tardes.

El conductor no contestó. Luego con su brazo derecho se abrazó a la primera barra que encontró y buscó el abono de pensionista que mostró al conductor antes de meter en la ranura del cobrador automático.

-Clin.

El sonido electrónico de la campanilla coincidió con el brusco arranque del autobús, María guardó el abono en el bolso y con paso tambaleante se dirigió hacia el interior del autobús, no llevaba mucha gente, varios jóvenes con aspecto divertido, dos chicas con los cascos puestos, una pareja mayor que de inmediato le hizo pensar en lo bien que podrían estar Emilio y ella si no fuera por el maldito tabaco, dos parejas más y algún que otro viajero solitario de tez oscura y ojos rasgados.

María se sentó sola junto a la ventanilla con el bolso sobre el regazo fuertemente sujeto con ambas manos. Hasta su barrio había un buen trayecto, hacía menos de media hora que había salido de la casa de su hija Carmen, la pequeña de los tres hijos que Dios les había dado. Había pasado el fin de semana cuidando a sus nietos, dos angelitos de 4 y 8 años que prácticamente habían criado ella y su marido, ya se sabe, ahora los matrimonios jóvenes tienen que trabajar mucho para pagar la hipoteca y el coche y el congelador y la secadora y el DVD y el televisor de plasma y las vacaciones y las comuniones de los chicos y quién sabe cuantas cosas mas, y no les queda tiempo de criar a sus hijos, si no hubiera sido por Emilio y ella, su hija hubiera tenido que dejar el trabajo y no podrían haber pagado todas las cosas de las que disfrutaban.

Cuantas veces Emilio y ella habían discutido por aquellas cosas, la verdad es que desde que su marido se jubiló hasta pocos días antes de morir, había paseado, traído y llevado al colegio a sus nietos muchas más veces de lo que había hecho con sus hijos durante toda su vida, a Emilio le agobiaba aquella responsabilidad, discutía con su mujer pero nunca se atrevió a decirle nada a su hija o a su yerno sobre aquella situación que llegaba a mortificarle.

El caso es que a ella le parecía que las cosas últimamente no iban bien en la pareja y habían decidido hacer un viaje para intentar arreglar la situación. Cuando llegaron el domingo por la tarde no tenían mejor cara que cuando se marcharon, pero ella, como pasaba desde hacía tiempo, no se había atrevido a comentar nada con su hija. Se limitó a recoger sus cuatro cosas, darle un beso a sus nietos y salir por la puerta, mientras su hija le reprochaba a su marido no llevarla hasta su casa con el coche y él se justificaba diciendo que estaba bien aparcado y que a la vuelta no iba a tener sitio para dejarlo, que el autobús estaba muy cerca y la dejaba en frente de su casa. Por supuesto ella había dado la razón a su yerno y los había dejado enfrascados en su primera reyerta post viaje de reconciliación.

Los escaparates de las tiendas cerradas pasaban raudos al otro lado de la ventanilla del autobús, la gente paseando, las farolas, los coches aparcados, todo pasaba veloz ante su mirada distraída, convirtiéndose en figuras anónimas, en simples trazos de color en una cinta continua que acariciaba sus sentidos produciéndola una dulce sensación de amodorramiento.

El traqueteo del autobús la transportó en el tiempo hasta otro viaje en el coche de línea que la trajo desde su pueblo hasta Madrid para trabajar como sirvienta en casa de unos parientes lejanos. No era más que una niña, nunca quiso marcharse de su pueblo, ni se había planteado dejar el lugar templado de su infancia, ella no conocía otra cosa diferente, no había pensado que la escasa e inconstante ración de pan y caldo que había en su casa a la hora de comer y que las ropas raídas y mil veces remendadas de ella y sus hermanos pudieran traer consigo más desdicha, y no sabía que el olor acre que desprendían sus cuerpos era el estigma del descuido y la miseria. Nunca había pensado que su madre había sido más bonita que cuando ella la veía, ni que sus padres estaban muy delgados y que aquella sensación recurrente de hambre no era el estado habitual de todas las personas, no pensaba que las cosas malas que les pasaban pedían otros nuevos sacrificios, no sabía que habían tocado fondo, que su familia no podía seguir existiendo, que eran muy pobres y que la supervivencia exigía romper con lo único que les mantenía unidos.

Continuar leyendo.

En esto de la fotografía, hay dudas que siempre están por resolver y dependerá de cada uno la respuesta. En mi caso fue antes la compra que la pregunta y mucho antes de reconocer la necesidad de un teleobjetivo, ya estaba haciendo cuentas para conseguir el Tamron SP 150-600mm F/5-6.3 VC USD, que dicho sea de paso me ha dado un juego espectacular y me ha acompañado en más de una salida de fauna y viajes. 

Dicen que a partir de 80mm de distancia focal en full frame se puede considerar un teleobjetivo. Seguramente es así, y mi todoterreno Nikon AF-S DX 18-140mm 3.5-5.6G ED VR que normalmente me acompaña en la mochila lo sea, pero no me refiero a esto cuando me hago la pregunta, me refiero a un teleobjetivo capaz de llenar el encuadre con un motivo más o menos lejano o de difícil acceso con una buena calidad y libre de distorsiones. Repasaré algunas cuestiones para saber si "Necesito un Teleobjetivo".

Cuando salgo de viaje o de escapadas cortas para fotografiar fauna, las aves, los animales están normalmente lejos y son celosos de su entorno con lo que acercarnos es en ocasiones difícil, además de la posibilidad de que el acceso a estos en la mayoría de ocasiones también se complica. A una distancia de 60 o 100 metros con un objetivo como el Nikon AF-S 70-300mm f / 4.5-5.6G IF-ED VR es seguro que la fotografía quedará bien, pero también es seguro que querremos más, hasta ver el ojo y las pestañas del animal, ¿o no?.

En actividades deportivas como las carreras de coches, motos, aviones, el emplazamiento y la seguridad es lo primero y si cumples esta consigna, está claro que necesitarás un super teleobjetivo. Además, sueñas con esa fotografía con el fondo difuminado, con un bokeh perfecto y eso solo será posible si contamos con un buen teleobjetivo con una gran distancia focal. Ni te cuento si lo que quieres es "fotografiar la Luna".

Tengo costumbre también de hacer retratos, sobretodo cuando voy de viaje. Retratos naturales en los que las personas están en sus rutinas y es difícil acercarte a ellas. El último ejemplo ha sido en los "7 días en Egipto" cuando desde el crucero por el Nilo intentaba el acercamiento a los agricultores o pescadores. Aunque hay fotografías que considero muy aceptables, me quedé con ganas de alcanzar más allá de los 200mm.

Aumentar la distancia focal hace que podamos sacar objetos lejanos como si estuvieran ocupando un primer plano, pero también nos permite la posibilidad de hacer mucho más grandes objetos que en realidad son pequeños como es el caso de insectos, hojas o flores. Si no llevamos en la mochila un objetivo dedicado al macro, un teleobjetivo como por ejemplo el Nikkor 70-200 mm f/2.8G ED VR II nos puede sacar unas fotografías más que decentes.

En la naturaleza, muchos de los motivos que querremos fotografiar, son sujetos asustadizos y esquivos que no permitirán nuestra presencia y hacer la foto desde lejos daría más protagonismo al entorno y tendría demasiada distracción para que nuestro motivo principal merezca la pena. En estos casos y en otros parecidos, un buen teleobjetivo puede salvar la situación. Ver "Safari en Chitwan".

En la localidad donde vivo, tenemos la enorme fortuna de contar con "Polvoranca", uno de los mejores parques de la región y cada año las aves migratorias descansan en su entorno. Es un lugar estupendo para pequeñas salidas a la caza fotográfica. de aves en las que los teleobjetivos largos son absolutamente necesarios y además para paseos largos cargar con un trípode es complicado, así que un monopié y el VR de nuestro objetivo solucionará la inmensa mayoría de situaciones.

La ventaja más evidente de un teleobjetivo, sin duda, es que nos permite acercarnos sin movernos del sitio, bien por necesidad de guardar la distancia o por imposibilidad de acortarla. Nos permitirá fotografiar una escena sin que el sujeto se percate de nuestra presencia y llenar el encuadre sin distorsiones y ver nuestro sujeto de forma muy nítida con el fondo más desenfocado.

Lo tengo claro, después de todo esto, la respuesta es: Sí, necesito un teleobjetivo y una opción muy estimulante es la nueva lente AF-S Nikkor 200-500mm f/5.6E ED VR de Nikon, que aunque es FX, montado en cámara de formato DX aumenta la capacidad de zoom hasta el equivalente a 750mm. Pronto las aves, las actividades deportivas, la vida silvestre y los retratos robados podrán ser alcanzados con la mejor aliada par este objetivo, mi Nikon D7100.

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Según los cálculos del Observatorio Astronómico Nacional (Instituto Geográfico Nacional - Ministerio de Fomento), este año la primavera de 2014 comenzará el jueves 20 de marzo a las 17h 57m hora oficial peninsular, una hora antes en Canarias. La tierra estará en pocos días en la posición que por convenio le corresponde, cuando el centro del Sol cruza el ecuador celeste hacia el norte.

Faltan diez días y sin embargo el sol, los días, los árboles y las plantas... las flores gritan "Primavera a la vista" y como locas llenan de luz y color el campo y los paseos. Desde Solagua hacia La Fortuna en Leganés, podemos observar algunos ejemplares explosivos de estos días como los que he fotografiado con mi Nikon.

Los días son más largos y la naturaleza está como loca. Por el día podemos disfrutar de la luz y por las noches de la luna llena o las estrellas, el brillante Marte se dejará ver toda la noche y se acercará a la Tierra más que nunca. Está la Primavera a la vista, solo tienes que ver estas fotografías para entenderlo. 

Si con un simple paseo durante la mañana no es suficiente, aquí te dejo un poema de Octavio Paz para acompañar las imágenes. Déjate alborotar, deja que la vida llene tus venas.

Déjate llevar y grita:      "Primavera a la vista".

Otros poemas en "Las Cosas del Abuelo O'hara"

De vez en cuando unas fotografías pueden contar una historia. Hace ya algún tiempo os conté lo que ocurría en el interior de la "Torre Okupa" en Venezuela mediante algunas imágenes. Ahora de nuevo unas cuantas imágenes pueden hacerte ver un lugar, una ciudad, un espacio de vida. El fotógrafo de estudio de Michael Wolf de Hong Kong, nos cuenta una historia en "La Arquitectura de la Densidad".

¿Has pensado alguna vez en lo que es vivir?, ¿lo que significa vivir en una ciudad?. ¿Y si esa ciudad es Hong Kong y tu espacio vital, quizás compartido con alguien más se reduce a unos pocos metros cuadrados?

¿Te imaginas vivir en uno de estos lugares en los que desde el portal hasta la puerta de tu casa debieras recorrer kilómetros y caminar durante media hora?, fuerte, ¿verdad?. Todo es bastante más difícil que eso, puedes ver espacios si ventanas, sin ventilación, donde solo un reloj puede marcarte el tiempo, ni el sol o la luna lo harán.

Un espacio desde donde es imposible ver el cielo o la tierra y uno se debe preguntar todos los días si merece la pena vivir así. Una colmena humana, en la que no somos nada. Una megaciudad, un megaedificio de apartamentos donde los espacios son iguales para todos.

Las colmenas son un patrón de construcción. Puedes tardar algunos segundos en comprender lo enorme que puede ser el edificio que estás viendo en estas fotografías y solo al ver el interior de las únicas estancias podrás comprender que dentro hay personas, ciudadanos algunos de ellos privilegiados, que pueden asomarse a la ventana.

Aquí solo ves las fachadas de los edificios, cientos de ventanas iguales, huecos donde puedes ver algunas prendas de vestir tendidas o motores de aire acondicionado. Una superpoblación en la que simplemente vivir, si se puede llamar así, es solo inercia. Es la "Arquitectura de la Densidad", donde con un poco de esfuerzo podrás subir cien pisos y recorrer unos kilómetros de pasillos para hacerte la ilusión de vivir en algún edificio enorme de la ciudad de Shanghai o Hong Kong.

La ausencia de personas en las fotos nos hacen meditar sobre el futuro. Piensa en lo que puede ser vivir así. ¿Es lo que queremos?. Después de este proyecto, Michael Wolf realizó "100x100", una historia en imágenes de cien interiores de viviendas públicas donde cada habitación tiene las mismas medidas 10 pies por 10 pies.

Pincha en las fotografías para verlas más grandes y hacerte una mejor idea de la situación que viven millones de personas. Quizá seas capaz de encontrar la vida en ellas. Espero tus comentarios.

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Nuestro viaje a Egipto fue, lógicamente por vía aérea desde Madrid, pero una vez allí utilizamos como medio de transporte y alojamiento una nave crucero por el río Nilo, el Princess Sarah. De esa forma el viaje tuvo un doble atractivo y a la parte cultural se unió la de poder gozar del río de la vida y su naturaleza desde Asuán hasta Luxor. Para una próxima visita, que espero poder hacer pronto, dejo Alejandría o el Mar Rojo.

Seré parco en datos numéricos o geométricos, dimensiones o años exactos. Prefiero daros solo unas sencillas indicaciones y adornar algo más los textos de cada uno de los "15 lugares que no puedes dejar de ver en Egipto" con mis impresiones y sensaciones en este maravilloso viaje.  "7 días en Egipto".

He dividido los 15 lugares por las ciudades o regiones donde se encuentran, de forma que sea más fácil seguirlos geográficamente. En el artículo principal os dejé un mapa del viaje que podéis seguir. Añado también, como no podía ser de otro modo, mis propias imágenes recogidas con mi "Equipo fotográfico". Aunque ya os añado que no hay ninguna del interior del valle de los Reyes, donde está terminantemente prohibida la utilización de cámaras o móviles. No existe la posibilidad de pagar tasas para poder disparar como en el Museo Egipcio.

Comenzamos el viaje.

"15 lugares imprescindibles de Egipto - I"

Edfu:

El templo de Edfu fue dedicado al dios halcón Horus como unos doscientos años antes de cristo. Es el templo mejor conservado de Egipto y el más importante después del de Karnak que también vamos a visitar.

Como la mayoría de los templos tiene diferentes patios, salas, cámaras de ofrendas, santuarios y todo ello en una construcción colosal la sala central y el santuario. Nuestro guía, Mohamed hizo especial incapíe en como iluminaban el templo y pudimos ver las pequeñas aberturas que permitían el paso de la luz hasta determinadas habitaciones desde su orientación al sur.

Desde el inicio de su construcción, cada faraón iba añadiendo patios y zonas a la parte más antigua y de ese modo se fue ampliando hasta lo actual. La entrada principal es espectacular y se aprecian los relieves como en un espejo, de forma que a izquierda y derecha se anteponen como si la puerta fuera un eje imaginario.

Fue norma en todo nuestro viaje "7 días en Egipto" procurar llegar los primeros a los templos. Aquí nos vino de lujo y poco después de amanecer, antes de que llegaran los cientos de orientales con sus cámaras y sus prisas, pudimos retratarnos con la imagen del dios Horus más famosa de Egipto y respirar hondo al ver los rayos de sol entrar en el templo.

Al final del templo accedemos a unas salas donde podemos ver la "barca sagrada" de Horus en el templo de Edfu. En Egipto creían que con estas barcas funerarias alcanzarían el reino de los muertos entre las estrellas a través del cielo que al fin y al cabo consideraban un río.

Asuán:

2. Templo de Filae

El templo de Philae (Filae) se llama así por la isla sobre la que estaba antes de su actual emplazamiento en la isla de Egelika, a la que llegamos desde un embarcadero con una pequeña motora. El trayecto no dura más de diez o quince minutos. En los dos embarcaderos hay vendedores ambulantes ofreciendo sus objetos a los turistas.

Este templo es de alrededor de 700 años a.C. y en su edificación participaron bastantes reyes a lo largo de más de 500 años. Fue construido en honor a Isis, la divinidad femenina más conocida de la historia de Egipto que representaba la mujer, la vida, la magia y sobretodo la sabiduría. 

Se puede pasear durante un buen rato por la isla y ver las edificaciones y las enormes columnas y patios. Podemos ver a la diosa Isis portando sobre su cabeza el dorado disco solar entre los plateados cuernos de la luna que se asociaba al comienzo del año nuevo egipcio y a las crecidas del río Nilo que alimentaban con sus aguas las tierras para que la cosecha pudiera ser abundante.

La visita a la cantera de Asuán y al Obelisco inacabado es eminentemente didáctica y podemos ver claramente la forma en la que se tallaban y extraían este tipo de esculturas de la roca en una pieza. El obelisco es el modelo arquitectónico más antiguo de Egipto y seguro que habéis visto más de uno en las grandes ciudades europeas. Quizá el más famoso sea el obelisco de la plaza de la concordia en París, que por cierto pertenece al templo de Luxor y por lo tanto falta de ese lugar.

Se considera símbolo de estabilidad y permanencia, poder, virilidad, fertilidad y fuerza creativa. Normalmente era tallado en toda su altura y algunas veces cubierto de metales preciosos. Para tallarlo, una vez estaba en posición vertical, lo cubrían de adobe en forma de terrazas o escalones para poder subir y los escultores del rey o del faraón lo acicalaban de arriba hacia abajo.

El Obelisco inacabado en la cantera de granito de Asuán, se rompió y se puede ver perfectamente la grieta por la que se abandonó. Mohamed nos explicó la técnica para transportarlos y ponerlos de pie, aunque solo hay constancia de parte de estas maniobras. También se observan las hendiduras donde introducían las cuñas para abrir y partir las enormes rocas.

El inacabado, habría medido unos 41 metros de largo y pesado más de mil toneladas, así que habría puesto a prueba las maniobras de extracción y traslado y al pueblo egipcio entero. Te preguntaras como nosotros lo hicimos, como se desprende la última cara de abajo, pues dicen que se excavaba a ambos lados y después se partía haciendo palanca. No me extraña que se partiera después de trabajar tanto.

La visita es llamativa, pero mucho cuidado con el calor. Es una explanada y los pasos a través de las rocas de granito mediante puentes de madera y pasarelas a pleno sol os pueden hacer pasar un buen rato de calor sofocante. A la salida os espera como siempre un pequeño mercadillo por si queréis comprar un recuerdo o tomar un refrigerio.


Kom Ombo:

4. Templo de Kom Ombo y Museo del Cocodrilo

El templo de Kom Ombo, dedicado al dios cocodrilo Sobek y el dios Horus. En un principio la divinidad era solo Sobek, pero los aldeanos no estaban contentos con tener solo un dios que representara el mal, así que hicieron un segundo templo al dios halcón. Por eso tiene dos entradas separadas con una simetría perfecta, esta cuestión parece que ha dejado un modelo de arquitectura única.

Al llegar por el Nilo desde el barco, se pueden ver las estructuras entre el río y los campos de cultivo. El templo está a muy poca distancia del embarcadero y fuimos paseando por la orilla y además a última hora de la tarde con lo que vimos desde allí atardecer. Sencillamente fue una visita espectacular.

Buscando hueco entre los numerosos turistas, Mohamed nos fue contando la historia de este templo y enseñando sus estupendos y bien cuidados relieves y motivos, su estructura y curiosidades entre las que nos llamó la atención el sistema que tenían los antiguos para predecir las crecidas.

Pudimos ver el "Nilómetro", un pozo con conexión directa con el río y que servía para medir las futuras crecidas del Nilo, un sistema que permitía a los sacerdotes y los gobernantes adelantarse en el tiempo y conocer que sucedería con las aguas, si subirían y hasta donde para conocer a que distancia los campos de cultivo tendrían suficiente riego.

Junto al Templo de Kom Ombo está el museo del Cocodrilo donde se exponen algunas de las trescientas momias de estos animales y se puede observar el proceso por el que pasaban. Es un museo pequeño y se ve en un rato, simplemente curioso.

Luxor:

Se trata de uno de los templos más importantes del Antiguo Egipto y su obra se debe a dos importantes faraones, Amenhotep III y Ramses II. Esta visita la hicimos totalmente de noche y la zona estaba perfectamente iluminada. No se como será de día pero a nosotros nos parece una parada imprescindible si queremos disfrutar de la historia y la belleza del arte antiguo.

El templo nos recibe en su entrada desde la avenida de las esfinges que dicen que concectaban los templos de Luxor y Karnak. Unas 1400 esfinges a lo largo de tres kilómetros de distancia. A la entrada del templo, como decía nuestro amigo Mohamed, se encuentran los enormes bustos de Ramses II que siempre quería salir el primero en la foto. Junto a él uno de los preciosos obeliscos. El otro se encuentra en la Plaza de la Concordia de París, donado por el gobernador egipcio en 1830 a petición del egiptólogo francés Jean François Champollion.

Primero fue un templo destinado al culto del dios más importante Amón-Rá, después se fue transformando para albergar otros dioses, otras capillas y otras religiones. Esto nos llamó muchísimo la atención y pudimos ver dentro del templo a Ramses II una antigua iglesia y posteriormente una mezquita que en la actualidad está en funcionamiento.

En definitiva, para mi, todo un ejemplo de fusión arquitectónica y de respeto a la historia. Egipcios, griegos, romanos, cristianos y musulmanes han tenido actividad de culto en este lugar durante más de 3500 años. Cuando ahora escuchas la llamada a la oración en uno de sus patios de altas columnas mientras contemplas el resultado en este precioso templo de Luxor, quedas encantado como nosotros en estos "7 días en Egipto".

Edfu: 1Templo de Horus.

Asuán: 2 Templo de Filae. 3 El Obelisco Inacabado.

Kom Ombo: 4 Templo de Kom-Ombo y museo del cocodrilo.

Luxor: 5 Templo de Luxor.

Luxor:   6 Karnak Temple.  7 Medinet Habu Temple. 8 The Valley of the Kings

Memphis:   9 Mit Rahina Museum

Giza:   10 Pyramids y la gran Esfinge

Giza:   11 Saqqara y la Pirámide escalonada de Zoser

Abu Simbel:   12 Templo de Ramses II y el Templo de Nefertari

El Cairo:   13 Iglesia de Abu Sirga. 14 Egyptiam Museum. 15 Citadel of Salah Al-Din

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